miércoles, 29 de mayo de 2013





Prioridades de nuestro futuro

Bueno,tras tiempo sin publicar una entrada,hoy ya toca una nueva,y esta va a ser una crítica hacia la clase de ética.

Lo primero de todo es darle las gracias a nuestro profesor por tener tanta paciencia con nosotros a lo largo del curso pero sobre todo en este trimestre.

Me gustaría comenzar por los buenos aspectos que siempre nos depara la clase de ética.
Es la única clase a la cual nos gusta asistir y cuando nos perdemos una el lunes no sienta igual.
A lo largo del curso,nuestro profesor nos ha enseñado temas de vital importancia para la vida hoy en día,como la felicidad o los valores y sus respectivas teorías y como no a defender nuestras ideas ayudándonos por los conocimientos de los antiguos filósofos y sociedades.
Las clases en general son amenas,pues no hay mejor forma de enseñar a los alumnos una asignatura tan importante pero a que veces puede ser aburrida,como la de nuestro profesor. Él ha hecho que nosotros sintamos como él la ética y la filosofía. Siempre esta dispuesto a explicarnos lo que no entendamos las veces que haga falta,aunque sea lo más simple de la asignatura. Sus criterios de puntuación son justos y aunque a veces no nos guste lleva siempre la razón.

Los malos aspectos de la clase de ética quizás no los tenga él o la asignatura,quizás seamos nosotros,ya que sobre todo en el último trimestre no es que nos hayamos portado muy bien,hemos interrumpido clases e incluso casi forzamos castigos,pero a parte de eso creo que no hemos tenido mayores problemas en la clase de ética.

Así que lo único que espero es que el año que viene tenga a este mismo profesor porque es de los pocos que realmente te conquistan y cuyas enseñanzas se guardan para toda la vida.